Mi pequeño atelier. Lo fui arreglando poco a poco y aunque aún no está terminado, éste va siendo el resultado. En él disfruto pintando a la acuarela y oyendo el sonido del mar.
La panorámica desde mi mesa de trabajo es este mar que cambia cada día. Unas veces bravo, otras tranquilo.
Qué lugar más magnífico para pintar. Inspirador, sin duda. No me extraña que de ahí salgan obras tan hermosas. Felicidades. Me encanta tu trabajo.
ResponderEliminar